Y en algún momento yo dije que me faltaba mi fix de House porque en abril me quedé en el capítulo
Por que nadie puede negar que la TV ochentera es de lo más cheesy que existe en este mundo, series, caricaturas, videos musicales, nada se salva.
Y recordando los buenos viejos tiempos de cuando éramos chamacos, alguien mencionó que alguna vez Kit el auto increíble visitó México ni más ni menos. (después que nos burlamos de todo el theme y la intro de la serie)
Por supuesto, yo siendo la mujer de mundo que soy, vivía en GDL en aquel entonces, estaba en la primaria y mis papás me llevaron a ver a Kit el auto increíble a un circo o donde sea que lo estuvieran presentando.
Obviamente lo presumí: "YO conocí a Kit el auuuuuuuto increíble!" y en realidad no recuerdo gran cosa del día, ni cuántos años tenía (imagino que unos 9 ó 10?) ni qué traía puesto ni otra cosa excepto la gran y nunca olvidable decepción que sufrí ese día.
Resulta que Kit el auto increíble además de hacer cualquier cantidad de gracias que se supone que hacía (y dudo que algo similar a lo que veíamos en la tele) se tomaba momentos de su apretada agenda automotriz para conversar con la bola de mocosos que babeaban por su carrocería (yours truly entre ellos) y como no podía platicar con todos, pues elegían a un selecto grupo de infantes que hacían preguntitas.
Y quéeeee creen? pues que yo fui una de esas afortunadas personitas a las que le permitieron hacerle preguntas a Kit el auto increíble. Me acuerdo que morí de la emoción y n mil preguntas me venían a la mente, todas de tema tecnológico claro porque aunque lo más cercano a tecnología que conocía hasta ese entonces era el walkman y el nintendo siempre fui así como que geek wannabe (y además veía muchas películas/caricaturas de robots and the like)
Entonces mientras los otros niños preguntaban cosas mundanas como "qué te parece Guadalajara" y blablabla yo sufría tratando de definir qué pregunta era la más importante porque sólo tenía 1 oportunidad 1 de hacerla. Fue cuando se acercó una de las edecanes del chou y me dijo en voz bajita "pregúntale a qué equipo le va, a las chivas o al américa?"
En ese momento me di cuenta que todo el espectáculo era una completa farsa y mi corazoncito se rompió *snif* a tal nivel que cuando llegó mi momento de preguntar hice lo que me pidieron en lugar de exponer todo el fraude, simplemente porque la decepción era demasiada.
Se preguntarán por qué estaba tan devastada? lo confieso: en mi inocencia infantil pensaba que Kit el auto increíble era real... ya saben, como una compu con cuerpo de auto que tenía inteligencia artificial avanzada.
Claro cuando les conté mi trauma con Kit el auto increíble a W y G murieron de la risa y me hicieron carrilla forever, preguntándome si también creía en el chupacabras, santa clós, los reyes, la llorona, etc, etc, etc. Aunque no, la verdad es que no me acuerdo haber creído en nada de esas cosas; por alguna razón se me hizo más factible creer en un tipo de inteligencia artificial super avanzada.
Unos años después fui a los Universal Studios y en algún lado estaba Kit el auto increíble pero ya no quise ir a verlo porque pus, para qué? mi fe en los autos que hablan murió para siempre.
Además, en ese mismo viaje sufrí otra enorme decepción al visitar Sea World para la gran inauguración del tunel de los tiburones (que nadan sobre tu cabeza) a la Jaws 3.
Por cierto, Kit el auto increíble era fan de las chivas rayadas del Guadalajara (cosa que a mi me vale madres porque ni me gusta el futbol)